En casi todas las casas existe el temido cajón de los cables: un recipiente de madera que esconde los conectores de prácticamente todos los aparatos electrónicos de la vivienda.
Una forma fácil, rápida y efectiva de conseguir una herramienta para clasificar estos cables y evitar que se líen es utilizar una caja de cartón para fabricar el siguiente artilugio: «el separador de cables», o cuatro tiras rectangulares de dicho material unidas mediante unas pequeñas incisiones realizadas con tijeras.
El resultado no puede ser más espectacular (ver fotografía adjunta) y cutre al mismo tiempo, pero si estás harto de tener que desliar, una y otra vez, una maraña de cables enfurecidos, este es tu invento.